Viajar es una experiencia
realmente fascinante. Ya sea que nuestra intención sea relajarnos y tomarnos un
tiempo de ocio y descanso, o realizar actividades al aire libre que ejerciten
nuestro cuerpo, o descubrir y explorar sitios cargados de historia y
significado, sin lugar a dudas, hay ciertas cuestiones que conviene resolver
con antelación para despreocuparnos y que el único fin de nuestro viaje sea el
disfrute. Entre éstas, la definición del vuelo a tomar y el alojamiento son
cruciales ya que determinan en gran medida la orientación de nuestro viaje.
Sabemos que el transporte y el hospedaje son fundamentales cuestiones a
resolver. ¿Por qué empresa viajar? ¿Cuándo es conveniente reservar un pasaje de
avión? ¿Qué tipos de hoteles convienen? ¿Cómo elijo el hotel que más se ajuste
a mis expectativas y necesidades? Estas y otras son preguntas muy frecuentes
entre los viajeros.
En primer lugar, siempre es
recomendable contar con los pasajes aéreos con la suficiente antelación. Una de
las razones es que éstos suelen abaratarse cuanto más lejana de la fecha real
de viaje se expiden. Pero por otro lado, esto nos permite relajarnos y dedicar
el tiempo disponible a resolver y planificar el itinerario prestando atención a
otros aspectos importantes.
Si lo que buscamos cuando
definimos nuestro vuelo es comprar pasajes lo más económicos posible, entonces
tendremos que delimitar nuestra fecha de viaje en función de las ofertas que
nos ofrecen las diferentes empresas aéreas.
A la hora de comprar un pasaje en
avión es muy importante prestar atención a las tasas de interés que nos
cobrarán, las horas de los vuelos, el sitio en que se encuentra emplazado el
aeropuerto, el transporte con que cuenta para trasladarnos desde allí a nuestro
destino, y los precios de todo ello. Siempre es recomendable dirigirse hacia la
página oficial de la compañía aérea elegida, ya que esto aumenta las garantías.
Una excelente opción es comprar mediante Internet, con nuestra tarjeta de crédito,
los billetes de vuelo, ya que así nos evitamos tener que trasladarnos con
anterioridad hacia las oficinas de reservas y compras.
Dependiendo el destino que
deseemos, puede pasar que tengamos que tomarnos más de un avión para arribar;
la mayoría de las empresas nos ofrecen paquetes con trasbordos prefijados que
nos ahorran tiempos de espera. Si a la hora de comprar tus pasajes cuentas con
un plan de millas, esto te va a traer sin lugar a dudas grandes oportunidades,
ya que podrás canjearlo por tickets aéreos, upgrades en tus vuelos, estadías en
hoteles, productos o servicios.
No es posible afirmar que haya una
agencia o página web que nos ofrezca siempre los mejores precios para vuelos y
hoteles en todas las épocas del año y para todos los destinos. Lo deseable es
siempre dedicar una determinada cantidad de tiempo extra para realizar un
recorrido por la Web hasta encontrar los precios que se acomoden mejor a
nuestro presupuesto.
En cuanto al alojamiento, las
ofertas y el espectro de posibilidades son realmente infinitas. En todas partes
del mundo, cada sitio cuenta con una serie variada de hoteles, albergues,
cabañas y casas de familia que ofrecen distintos servicios. Para definir el
tipo de alojamiento que más nos convenga, tenemos que pensar en qué actividades
son las que queremos realizar, cuánto tiempo de nuestra estadía vamos a pasar
efectivamente dentro del hospedaje, qué comodidades pretendemos tener, y cuál
es el presupuesto con el que contamos.
La mayoría de los hoteles cuenta
con servicio de lavandería, restaurant, televisión por cable, estacionamiento e
Internet. El precio de los mismos, va variando de acuerdo a la ubicación
geográfica en que se encuentran, el tipo y la calidad de los servicios que
prestan y el reconocimiento que hayan obtenido por su reputación.
Si lo que buscamos es
tranquilidad, nos conviene optar por un hotel más bien alejado, tranquilo y
pequeño, donde estemos exentos del bullicio de las ciudades y el trajín de
pasajeros entrando y saliendo. Si nuestro plan es, por el contrario, divertirnos,
salir e imbuirnos de la vida urbana, los hoteles más céntricos suelen ser la
mejor opción, ya que de ellos tenemos mejor acceso a la vida nocturna, bares,
restaurantes y locales comerciales.
Internet nos ofrece una vasta
cantidad de páginas Web en las que encontramos sin movernos de nuestra casa,
las ofertas en tarifas, las comodidades y servicios que presta cada
establecimiento y una serie de fotografías que nos permiten hacernos una idea
de los espacios con que cuenta. Desde estos sitios podremos además reservar
automáticamente el alojamiento que mejor se ajuste a nuestros deseos y
necesidades.
En suma, a la hora de pensar y
organizar un viaje, sea cual sea el destino que elijamos, la definición del
vuelo que tomemos y del hotel donde nos hospedemos es crucial para que todo
marche a la perfección.
Lucía
Cugini
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